Tendón rotuliano; cómo quitar la inflamación y reforzarlo con Electroestimulación

El tendón rotuliano es uno de los tendones más fuertes de todo tu cuerpo. Situado en la parte inferior de la rodilla y conectado a la tibia, actúa como una continuación del cuádriceps y forma parte del aparato extensor de la pierna.

Si estás buscando cómo desinflamar el tendón rotuliano y fortalecerlo para prevenir nuevas lesiones, sigue leyendo porque te cuento cómo puedes hacerlo.

¿Por qué se inflama el tendón rotuliano?

La tendinitis del tendón rotuliano se produce cuando el tendón que conecta la rótula con la tibia se inflama y se irrita.

La inflamación suele estar relacionada con la sobrecarga repetitiva del tendón, y algunas de las causas pueden ser:

1. Sobreesfuerzo: Exceso de actividad física sin una adecuada preparación como correr, saltar o levantar pesos pesados.
2. Mala técnica de entrenamiento: Realizar ejercicios sin una técnica correcta o el uso de calzado inadecuado durante el entrenamiento.
3. Cambios en la actividad: Cambios en la rutina como aumentar la intensidad o la duración del entrenamiento, también pueden estresar el tendón y llevar a su inflamación.
4. Desalineación de la rodilla: Esta puede ser otra causada que produzca inflamación en la rodilla debido a un desequilibrio muscular, llegando en algunos casos a aumentar la presión en el tendón rotuliano y provocar su inflamación.
5. Edad: La tendinitis del tendón rotuliano también puede ser causada por el envejecimiento natural del cuerpo y la disminución de la capacidad de los tejidos para repararse a sí mismos.

Si sientes dolor e inflamación en la rodilla, lo mejor es detener la actividad física de inmediato y tratar la tendinitis del tendón rotuliano cuanto antes. Actuar rápido te ayudará a evitar que el tendón se dañe más y a reducir el tiempo de recuperación.

Qué hacer cuando el tendón rotuliano está inflamado

Si cada vez que activas el cuádriceps (saltar, montar en bici, bajar rampas, levantar pesas, subir escaleras…) sientes dolor en la zona frontal de la rodilla, deberías detener la actividad física y consultar a un médico para una evaluación adecuada.

Si, tras una evaluación médica te han diagnosticado sobrecarga o tendinitis en el tendón rotuliano, la electroestimulación puede ser una herramienta útil en tu recuperación.

Lo primero es descansar para reducir la inflamación

Para ayudar a tu cuerpo a bajar la inflamación, lo primero es suspender la actividad física y dar descanso a la zona afectada.

Si tienes oportunidad, eleva la pierna afectada el mayor tiempo posible. Túmbate en un sofá o cama y con ayuda de cojines o almohadas, ten la rodilla dañada más alta que la cabeza. Esto será útil para reducir la inflamación y facilitar el retorno venoso. Además, alivia la presión en la zona y favorece a la recuperación.

En cuanto al manejo del dolor, desde las primeras horas de la lesión puedes comenzar con el programa TENS para calmar el dolor, o Microcorriente e incluso Magnetoterapia para reducir la inflamación y acelerar la reparación del tejido dañado.

Calma el dolor y baja la inflamación con Microcorriente, TENS o Magnetoterapia

En la tendinitis rotuliana, lo más importante al inicio es controlar la inflamación y el dolor. Para ello, puedes utilizar Microcorriente, TENS o Magnetoterapia, que te ayudarán a aliviar las molestias y acelerar el proceso de recuperación.

TENS para tendinitis rotuliana

En la tendinitis del tendón rotuliano, el TENS reduce el dolor y la inflamación y su efecto es inmediato. Es una técnica no invasiva que utiliza pequeñas corrientes eléctricas para aliviar el dolor. A través de los electrodos, el programa TENS emite pequeñas corrientes eléctricas que estimulan los nervios y pueden bloquear las señales de dolor que se envían al cerebro.

Es importante señalar que la terapia TENS no es una cura para la tendinitis del tendón rotuliano, pero alivia mucho el dolor.

La manera de aplicarlo es sencilla. Solo tienes que colocar dos electrodos de 5×5 sobre el tendón rotuliano.

Si tu rodilla es pequeñita, utiliza un electrodo por encima y otro por debajo de la rodilla como esta imagen, y pon el programa TENS dos veces seguidas.

Otra manera de aplicar el programa TENS para tendinitis rotuliana es pegando cuatro electrodos de los grandes de 10×5 alrededor de la rodilla.

Si dispones de tiempo, realiza dos programas TENS seguidos. Repite esto dos veces al día, una sesión por la mañana y otra por la tarde. Te ayudará a reducir las molestias provocadas por la inflamación.

Si no sabes cómo se usa este programa, en el siguiente artículo te cuento en profundidad cómo funciona el programa TENS.

Existen diferentes accesorios que harán que la electroestimulación sea más cómoda, como parches especialmente diseñados para el contorno de la rodilla o rodillera conductiva que no necesita electrodos de recambio (no se gasta nunca).

Microcorriente para tendinitis rotuliana

La Microcorriente es mucho mejor para desinflamar el tendón rotuliano. Utiliza corrientes eléctricas muy bajas (en el rango de microamperios) para estimular la célula, ayudando al cuerpo a curar de manera natural. No es invasiva y se utiliza con bastante frecuencia en la medicina deportiva, la fisioterapia y la estética.

La diferencia principal entre estas dos técnicas es que TENS solo tapa el dolor, mientras que la Microcorriente ayuda al cuerpo a curar y reparar el tendón dañado.

Al igual que el TENS, la Microcorriente también se puede aplicar con electrodos y rodillera conductiva.

Aquí te dejo algunos de los electroestimuladores que tienen programas de Microcorriente y TENS.

Magnetoterapia para el tendón rotuliano

La magnetoterapia es otra opción para reducir la inflamación del tendón rotuliano.

Es también un tratamiento no invasivo que se utiliza con bastante frecuencia en medicina deportiva y fisioterapia gracias a su capacidad y efectividad para aliviar el dolor y acelerar el proceso de curación natural del cuerpo. Funciona a través de campos magnéticos pulsados de baja frecuencia que penetran en los tejidos, mejorando la circulación sanguínea, reduciendo la inflamación y activando la regeneración celular.

La principal ventaja de la magnetoterapia frente a las otras dos técnicas es que no solo actúa sobre el síntoma del dolor (como hace el programa TENS), sino que al igual que la Microcorriente, reduce de manera natural la inflamación y favorece la recuperación del tejido dañado pero en este caso, el efecto de los campos magnéticos pulsados es mayor y más profundo, ayudando al cuerpo a recuperar más rápido.

Para el dolor y la inflamación es la mejor elección.

Fortalece para evitar recaídas: Entrenamiento con electroestimulación para el tendón rotuliano

Una vez que la inflamación y el dolor han desaparecido, es el momento de comenzar a fortalecer las piernas para evitar recaídas. Lo puedes hacer de manera voluntaria, con ejercicio, pesas y cargas progresivas, o puedes usar un electroestimulador para fortalecer cuádriceps.

La ventaja de fortalecer con electroestimulación es que ayuda a prevenir recaídas al retomar la actividad física, ya que mejora el nivel de fuerza muscular sin estresar la rodilla ni el tendón.

Puedes hacer electroestimulación para reforzar el tendón rotuliano de la siguiente forma:

Coloca los electrodos en el cuádriceps como en la imagen.

Elige la mejor opción para ti según los parches que tengas.

Ponte de pie, frente a una mesa o respaldo de una silla para que te sirva de apoyo. Debajo de los talones coloca una cuña que te ayude a tener el talón levantado entre 3 y 5 cm.

Selecciona el programa “Fuerza Resistencia” y comienza a subir la intensidad poco a poco.

Cuando tengas una intensidad agradable, ve flexionando las rodillas con la espalda recta en cada contracción hasta un ángulo en las rodillas de 150 grados los primeros días, y manteniendo ese ángulo todo el tiempo que dure la contracción muscular.

Entre contracción y contracción, deja las piernas estiradas y relajadas.

No hace falta que flexiones mucho las rodillas las primeras veces. Que sea cómodo los primeros días. No busques el dolor. Para justo antes de que comience a molestar la rodilla.

En este ejercicio no es necesario subir mucho la intensidad ya que al mezclar voluntario más electroestimulación puedes crear muchas agujetas si subes en exceso la intensidad. Trabaja sobre 50 energías con Compex o 20 miliamperios en los Globus los primeros días.

Si tu electroestimulador tiene niveles, selecciona el nivel 1.

Semana a semana ve subiendo la intensidad y bajando el ángulo de inclinación de las rodillas hasta llegar a 90 grados.

Este ejercicio lo puedes realizar dos veces a la semana, por ejemplo el lunes y el jueves. Te sentirás con más fuerza en piernas y rodillas y en tres semanas, te estarás olvidando por completo de tus problemas con el tendón rotuliano.

Aquí te dejo un corto video explicativo donde te cuento cómo realizar el entrenamiento para evitar y recuperar las lesiones en el tendón rotuliano

La vuelta a la actividad deportiva hay que hacerla con precaución

Y cuando vuelvas a realizar ejercicio, asegúrate de que todos los componentes que utilizas están bien ajustados y adaptados a ti;

Si montas en bici revisa la posición de los calas y las zapatillas. Que vayan paralelos a las bielas.

Si sales a correr, observa que la pisada sea correcta y que las zapatillas no te están haciendo daño.

Cuando retomes la actividad física, comienza los primeros días corriendo en terrenos más blandos, y si practicas ciclismo, utiliza un desarrollo ligero y pedalea con una buena cadencia. Esto te permitirá reintegrarte progresivamente al ejercicio y reducir el riesgo de recaer en la lesión del tendón rotuliano.

Sé Feliz

Pedro García