Yo soy

Hola, soy Pedro García,  el creador de esta web 

y un apasionado del deporte y la electroestimulación

Desde hace más de 30 años practico deporte con asiduidad y es un hábito que forma parte de mi vida. Me relaja, me da fuerza y energía y mantiene el equilibrio entre mi cuerpo y mi mente.

En todo este tiempo relacionado con el deporte he pasado por muchos momentos importantes.

He representado a España en competiciones internacionales, he disputado campeonatos a nivel nacional, regional y local, he probado multitud de técnicas de entrenamiento para incrementar la fuerza, acelerar la recuperación y mejorar mis resultados, he sufrido lesiones, he ganado competiciones, he perdido otras muchas, pero lo más importante es que he aprendido muchas cosas de todas mis experiencias.

En la actualidad practico deporte por afición, principalmente ciclismo y squash y acudo dos veces por semana al gimnasio.

Con casi 50 años he de decir que me encuentro en un excelente estado de forma.

Con la edad el problema no es entrenar. La clave está en la recuperación.

Hace unos años tenía más tiempo para hacer deporte. Mi nivel era muy bueno y podía con todo. Entrenaba mucho y mi recuperación de un día para otro era excelente. Podía incluso salir un sábado a tomar un par de copas, irme a dormir a las 3.00 AM y al día siguiente levantarme a las 7.00 AM para hacer con la bici 100 km con mis amigos sin ningún tipo de problema. A medio día echaba una siesta y estaba totalmente recuperado.

Pero con el paso de los años algunas cosas cambian.

Cada vez tengo menos tiempo para entrenar y las recuperaciones ya no son tan buenas como cuando era más joven.

Me preocupaba no poder mantener el nivel de forma que años atrás había alcanzado.

Cómo tener buenas recuperaciones y mantener un alto nivel entrenando lo justo

Tenía claro lo que necesitaba para mantener el nivel físico de años atrás.

Entrenar lo justo para conseguir el mayor rendimiento posible.

Pero claro, si entrenaba mucho, acumulaba gran cantidad de fatiga que me costaba recuperar varios días y si entrenaba poco, por supuesto que estaba menos fatigado pero el estado de forma era deficiente y sufría mucho en las rutas duras de más de 100 kilómetros.

Necesitaba encontrar algo que me ayudara con la recuperación y sobre todo con la fuerza.

Tenía claro que la clave estaba en esos dos puntos. Recuperación y Fuerza.

Y busqué y probé y volví a probar hasta que di con lo que necesitaba.

La electroestimulación es la clave

Una herramienta que me ayuda a conseguir el punto de fuerza que necesito en cada momento, reduciendo el tiempo de entrenamiento y ayudándome a recuperar más rápido entre sesión y sesión de entrenamiento.

Si necesito volumen en brazos y pecho porque se acerca la época de la playa, tengo un programa para aumentar la masa muscular.

Que he cogido algunos kilos después de la navidad o de las vacaciones de verano y necesito afinar, tres semanas con la faja de electroestimulación (y buenos hábitos de alimentación) y adiós a los kilos de más.

Que necesito resistencia en las piernas porque voy a comenzar la temporada de ciclismo y tengo poco tiempo para entrenar, uso el programa Resistencia.

Si necesito potencia en el dorsal para mejorar el golpe en el squash o quiero ganar fuerza para conseguir un par de puntos en la subida porque se acercan las rutas ciclistas más dura del año… el electroestimulador tiene un programa específico para entrenar y varios para recuperar.

Que quiero conseguir fuerza en un músculo determinado (de forma aislada) que me cuesta mucho entrenar en el gimnasio o necesito darme un masaje descontracturante para descargar… lo tengo siempre a punto en el electroestimulador.

Que mi señora quiere elevar y poner duros los glúteos o tonificar abdomen, usamos los programas de belleza.

Si en épocas de frío me duele la ciática, las cervicales o la zona lumbar o tengo epicondilitis por el squash, hay programas de rehabilitación en el menú del electroestimulador para tratar el dolor y las molestias musculares, articulares y tendinosas.

Tengo una herramienta que me ayuda a conseguir aquello que necesito en cada momento, en muy poco tiempo y con magníficos resultados.

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Con la electroestimulación he descubierto que para avanzar
no es necesario entrenar más, sino entrenar mejor. 

Pero no siempre fue así

En mis comienzos como ciclista me dedicaba a hacer series y series agotadoras y extenuantes para mejorar.

Cada semana tenía que ir a una rampa durísima que había cerca de mi casa para subir una y otra vez  y otra vez y otra vez, intentando coger fuerza en las piernas para mejorar en la subida que era donde fallaba.

Los principios de temporada eran temibles.

Los dolores de piernas el fin de semana después de horas y horas de entrenamiento eran muy fuertes y el masajista no abría hasta el lunes.

No tenía forma de relajar los músculos y eliminar de manera rápida esos dolores. Me daba masajes manuales y estiraba pero eso no era suficiente.

Y en las cervicales y sobre todo la zona lumbar… ufff, algunos días era terrible.

Hasta que esos músculos se volvían a acostumbrar a la postura de la bicicleta después de un largo periodo de descanso, pasaban muchas semanas con sensación incómoda de dolor.

Especialmente recuerdo el dolor en la zona lumbar

Muchos días las molestias y el dolor era tan fuerte que me bloqueaba las piernas y apenas podía hacer fuerza sobre los pedales.

Esto me sucedía cuando llevaba dos horas de entrenamiento (tengo una lesión en la L5, espondilolistesis y la espalda baja es uno de mis puntos débiles)

Como siempre fui un poquito delgadito de la parte de arriba, de cara al verano me pasaba días y días en el gimnasio para intentar coger volumen, ya que en la playa las chicas se fijaban más en los chicos con grandes brazos que en los que eran delgados como yo.

Al final del verano lo que había conseguido era tener algún que otro músculo lesionado por intentar mover tanto peso en el gimnasio. .

Pero un día algo ocurrió en mi vida que me ayudó a mejorar de manera importante

En 1997, después de correr las Paralimpiadas de Atlanta´96 (en aquella época era piloto integrante de la selección Española de ciclismo en Tándem. También participé en Barcelona´92, diversos campeonatos del mundo y de Europa y campeonatos nacionales) decidí dejar la competición y tomarme la bicicleta para dar paseos y echar las mañanas del domingo con los amigos.

En los años que me dedicaba a la competición comencé a escuchar a compañeros y a los fisioterapeutas que nos acompañaban, a hablar sobre la electroestimulación, pero eso resultaba muy lejano para mí. Sencillamente no confiaba en ella.

En el año 2008 vuelve a surgir en mí el interés por la electroestimulación debido a un artículo que leí y que decía que se había demostrado mayor efectividad de la electroestimulación frente al trabajo voluntario.

Me puse a investigar y encontré de todo:

• Foros en los que se decía que eso no funcionaba.
• Personas que lo tenían pero que no lo usaban.
• Algunos que decían que solamente funcionaba para recuperar.
• Casi todos decían que no servía para conseguir más fuerza, solo para masaje.
• Y por supuesto los estudios científicos que decían que sí que funcionaba.

Me planteaba la siguiente pregunta:

¿CÓMO ES POSIBLE QUE UNA MISMA COSA PROVOQUE OPINIONES TAN DISTINTAS?

Como seguía montando en bicicleta en plan de paseo y mi curiosidad cada vez era mayor, decidí probarlo y me compré un electroestimulador.

Me puse a estudiar toda la información que llegaba a mis manos.

Hablé con especialistas, asistí a distintos cursos y seminarios, incluso en el extranjero y busqué información en todos los idiomas. Me formé y hasta el día de hoy esa formación sigue siendo pieza clave y fundamental en mi día a día. No pasa más de un mes sin que haya asistido a una formación o curso, o que haya leído algún libro o informe de expertos que hable de electroestimulación.

Para resumir un poco la historia, ese mismo año después de entrenar unos meses con electroestimulación, me encontré tan fuerte que volví a competir después de 12 años alejado del mundo de las carreras.

El mejor puesto que hice fue el 3º en una prueba que sacamos 44Km/h de media.

Ese año descubrí una potente herramienta para alcanzar con mayor facilidad mis metas, y entrenando lo justo.

Continué investigando y estudiando y poco a poco fui adquiriendo experiencia, pero el gran salto lo di de la mano de los dos grandes fabricantes con los que trabajo.

Gracias a los manuales y cursos específicos impartidos por Compex y Globus, descubrí cómo utilizar correctamente el electroestimulador y poco a poco aprendí a sacarle un gran partido a estos equipos, y no solo para la bicicleta, sino para muchas más cosas.

Sin la formación específica de los dos grandes fabricantes, habría sido imposible.

Que viene el verano y queremos lucir tipo en la playa… Vamos a entrenar brazos, abdomen y pechos para conseguir volumen y definición.

Qué comienza la temporada ciclista y necesito resistencia… Entrenamos tres veces a la semana con electroestimulador y solucionado.

Como sé que la espalda me dolerá en invierno cuando comience a realizar grandes esfuerzos… me anticipo y la fortalezco para evitar que aparezca el dolor.

Que después de las navidades me ha salido una pequeña tripilla de grasa que no me gusta… Programa para perderla cuanto antes y quedar lisos y duros los abdominales.

Que a partir de Mayo comienzan las marchas ciclistas a las que asiste con mi club y hay subidas duras… Un mes antes entrenar específicamente para ganar fuerza en las piernas y conseguir subir mejor.

Que tengo las piernas, lumbares, cervicales, espalda… cargada o dolorida… Un masaje de descarga con el electroestimulador a la hora y en el momento que yo quiera me ayuda a recuperar más rápido.

Que necesito potencia para ganar ventaja en el saque de squash… Entrenamiento específico de tres semanas y listo. .

Si yo pude hacerlo, tú también puedes hacerlo

Afortunadamente, la electroestimulación es una herramienta accesible para prácticamente todo el mundo.

Bien utilizada, te ayudar a:

• Mejorar tu rendimiento en el momento que precises
• Ganar más masa muscular
• Ganar más fuerza para subir mejor con la bicicleta o correr más rápido a pie, o jugar al tenis o pádel sin cansarte tanto, incluso mejorar la velocidad de reacción para artes marciales…
• Conseguir tus objetivos deportivos entrenando lo justo
• Relajar tus músculos cuando lo desees con un masaje
• Recuperar antes las lesiones
• Modelar y tonificar tu cuerpo a tu gusto
• Fortalecer músculos de la espalda para una mayor calidad de vida con menos dolores

En ElectroEstimulación Deportiva te voy a contar mi experiencia, cómo lo hice, en qué me equivoqué, qué acciones realizar para tener resultados más efectivos y siempre respetando las recomendaciones que el fabricante indica.

Si compras tu electroestimulador en mi tienda, te llevaré de la mano para enseñarte cómo utilizar bien tu equipo, cómo sacarle provecho.

Regístrate en mi página para que estemos en contacto y pueda enviarte ofertas y artículos interesantes con los que aprenderás a utilizar y sacar más rendimiento a tu electroestimulador.

Gracias por permitirme contarte mi historia.

Gracias por estar ahí.

Juntos vamos a conseguir buenos resultados.

Sé feliz
Pedro García